Tú reino
Cuando somos adolescentes tenemos siempre la imagen de nuestro padres o nuestros mayores en general sermoneándonos, regañando y diciéndonos continuamente lo que hacemos mal y tenemos que corregir.
Con el paso del tiempo nos damos cuentas que entre sus regañinas y sus frases correctivas se colaban una serie de valores que con el pasar de los años hemos ido interiorizando.
Someterse a unas normas en una casa es duro cuando se quiere ser “libre” y romper con todo pero implica que existe una familia que nos enseña a convivir y que nos quiere. Obligarte a cumplir tu palabra o enseñarte que lo que haces tiene consecuencias probablemente te convertirá en una mejor persona el día de mañana y un profesional de éxito porque tendrás la cabeza “bien amueblada”.
Este vinilo con esta frase que nos recuerdan que existen también tenemos nuestro espacio aunque haya unas normas que cumplir; puede colocarse en la puerta de casa para adornar en la de un cuarto, adolescente. Otra opción que me parece muy buena idea es colocarlo a la entrada en un piso compartido de estudiantes o jóvenes trabajadores. Nunca está de más echar un vistazo cuando entramos o salimos de casa.